domingo, 25 de septiembre de 2016

Desprecio vs. reverencia por la vida... Leyendo a Lewis Mumford

"...pues incluso el uso de la energía atómica en tiempo de paz debería ser motivo de una grave preocupación. A este respecto, no me tranquilizan en absoluto las sedantes explicaciones que ha ofrecido nuestra Comisión de la Energía Atómica. Está claro que la historia de la contaminación industrial ordinaria no nos da motivo para la confianza: nuestra infantil falta de previsión bajo el entusiasmo de la novedad, nuestro desprecio por la salud cuando están en juego los beneficios, nuestra falta de reverencia por la vida, incluso si es la nuestra, siguen envenenando la atmósfera de todas las zonas industriales y convirtiendo los arroyos y los ríos, por no hablar del aire que respiramos, en inadecuados para la vida orgánica. La gente que ahora propone el uso a gran escala de la energía atómica es la misma gente que aún no ha hecho un esfuerzo, hablando en términos tecnológicos, por librarse del letal monóxido de carbono que expulsan los automóviles, la misma gente cuyas fábricas exponen a los habitantes de las zonas industriales a un aire contaminado con prácticamente todas las sustancias cancerígenas conocidas"




     Estas palabras forman parte del discurso que Lewis Mumford pronunció en 1955 en un Congreso sobre el papel del hombre en la transformación de la faz de la tierra. Su título es "El futuro abierto" y buena parte de los temas y preocupaciones que señalaba el pensador norteamericano hace sesenta años están presentes en las clases con mis alumnos de ciencias sociales, geografía e historia: los peligros de la energía nuclear, la fragilidad de la vida en el planeta, la contaminación atmosférica, la omnipresencia del automóvil en nuestra movilidad, la primacía del beneficio económico sobre la salud, las contradicciones de los avances tecnológicos, el infantilismo y consumismo de nuestras sociedades, la necesidad de cuidar nuestro aire, nuestros arroyos y nuestros ríos...
     Para que podamos mirar con cierto optimismo ese futuro abierto, la reverencia tiene que ir ganándole terreno al desprecio por la vida. En este sentido, la educación puede ser una herramienta de gran valor.
     [El discurso forma parte de la estupenda colección de Ensayos, interpretaciones y pronósticos que ha publicado recientemente la editorial Pepitas de calabaza]. 
Para Alfonso